Con un frío que no termina de irse todavía es buen momento para preparar un plato delicioso y que nos ayude a calentarnos mientras lo preparamos. El guiso a fuego lento es la opción ideal para estas situaciones. Para hoy, Noe, del blog Las Recetas de Noe, nos deleita con una receta de guiso de repollo, costillas de cerdo y patatas. Para hacerlo ha utilizado una Cocotte de hierro fundido de la colección Bienestar, que cuenta con una tapa especial que hace que se concentre en ella el vapor.
INGREDIENTES
- Medio kilo de costillas de cerdo, partidas en trozos pequeños
- Medio kilo de repollo
- Medio kilo de patatas
- Dos zanahorias
- Aceite de oliva virgen extra
- Ajo molido, perejil picado y sal
- Tres dientes de ajo
- Una cucharadita de pimentón dulce
PREPARACIÓN
Ponemos una sartén o plancha con un poco de aceite de oliva virgen extra. Una vez esté caliente añadimos las costillas, las marcamos muy bien por ambos lados y cuando estén doradas les ponemos sal, ajo molido y perejil picado. Las hacemos otro par de minutos y reservamos.
Ahora colocamos en la olla las patatas peladas, lavadas y cortadas en dados, junto con el repollo que habremos lavado y picado a nuestro gusto y las zanahorias, peladas, lavadas y picadas en daditos pequeños. Cubrimos con agua, añadimos una cucharadita de sal y dejamos que se haga a fuego lento. Lo dejaremos 40 minutos. Luego añadimos las costillas que teníamos reservadas y pasamos a preparar el refrito. Para ello ponemos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra en una sartén pequeña y añadimos tres dientes de ajo picados. Dejamos que se hagan y añadimos una cucharadita de pimentón. Este refrito lo añadiremos a nuestra olla que, junto con las costillas, dejaremos que se hagan a fuego lento durante 20 minutos más.