La merienda es muy importante para poder cumplir con las cinco comidas diarias recomendadas, a pesar de ello, muchas personas la pasan por alto. No es conveniente pasar más de 6 u 8 horas entre comida y comida por ello incluir esta comida en nuestra dieta conseguimos reducimos el tiempo de ingesta de alimentos entre la comida y además nos aporta la energía suficiente para pasar el resto de la tarde, mejorando nuestro rendimiento físico y mental.
La merienda debe aporta entre el 15 y el 20% de las calorías diarias que necesita nuestro organismo. Incluir frutas es una opción ideal, ya que es muy importante comer entre 4 y 5 piezas de fruta o verduras al día para suministrar al cuerpo las vitaminas necesarias. La podemos tomar ya sea una pieza de fruta, en macedonia o en zumo o smoothie.
El dulce no tiene porqué estar reñido con lo saludable. Tenemos que evitar la bollería industrial, aportan grasas saturadas y son fuente de problemas de salud como la obesidad y la diabetes. También debemos evitar el azúcar blanco y azúcares añadidos así como las harinas refinadas. Podemos tomar unas galletas integrales, un par de onzas de chocolate negro, algún postre casero, yogur desnatado con miel o granola.
Los frutos secos también son muy recomendables para incluir en nuestra merienda. Son ricas en proteínas y grasas poliinsaturadas, las comúnmente llamadas grasas buenas. Tómate un puñado de nueces, almendras, pistachos, avellanas, castañas, piñones,…ayudará a saciar tu hambre. Contienen ácidos grasos omega 3, que ayudan a controlar el colesterol del organismo, lo que les convierte en alimentos cardioprotectores.
Para que prefieran apostar por el salado, las crudités (bastones crudos de verduras) son una muy buena opción. Elige tus verduras favoritas (apio, zanahoria, pepino, pimiento,…) y hazte un cóctel con un añilo de limón, pimienta negra y unas gotas de aceite de oliva. Conseguirá saciarte y además está delicioso.
Los sandwiches siempre apetecen. Elige pan pan integral y puedes hacerte unos sandwiches vegetales con tomate, atún y lechuga; huevo duro, pepinillo, anchoa y tomate; de pavo y queso fresco,…
No tenemos que olvidarnos de la hidratación. Acompaña tu merienda con líquidos como un zumo natural, agua o una taza de té o infusión. Existe una amplia variedad de tés e infusiones, apenas tiene calorías y proporciona numerosos beneficios para la salud.
En las etapas de crecimiento es sumamente importante que la alimentación sea equilibrada y variada, por lo que la merienda es indispensable en niños y adolescentes.
A la hora de seleccionar y elegir la merienda, es necesario planificarse con antelación y equilibrarla con el resto de comidas. Es importante, elegir alimentos que no se estropeen y que sean fácil de digerir. Con nuestro porta sandwiches Go Peques los niños podrán conservar más tiempo los alimentos frescos y crujientes gracias al interior termoinsulado. Además dispone de un mosquetón para poder colgarlo de la mochila.